Dulces Promesas

Edifique mi casa sobre la roca, y si soplan los vientos, se que no me caeré,

Me levante y resplandecí, vi el amanecer llegar por mi ventana,

Era la gracia de Dios, una luz que anunciaba misericordia nueva como las que son cada mañana.

Soy como la luz de la aurora, que va en aumento, hasta que el día es perfecto.

Adorar en espíritu y en verdad es mi delicia,

Estar de rodillas ganando la buena batalla de la fe,

Y con la fe que mueve montañas empezar a declarar,

Que ninguna cosa creada nos podrá separar.

Es la intimidad la que me fortalece, es Tu palabra la que me alimenta,

Quiero un corazón limpio para poder verte,

Quiero correr a Ti en tiempo de angustia y ser levantado,

Quiero cantar Santo, Santo, Santo y postrar mi corona delante de Ti.

Porque creo veo la gloria de Dios,

Porque creo Te puedo ver en medio de la creación,

Porque creo se que caminas a mi lado derecho,

Porque creo siento el fuego.

Pueden caer mil y diez mil a mi diestra mas a mi no llegarán,

No me sobrevendrá mal alguno y ninguna plaga tocará mi morada,

Ningún arma forjada contra mi prosperará,

Porque habito bajo la sombra de Tus alas.

Mas que vencedor soy por medio de Aquel que me amó,

La victoria esta de mi lado, ningún mar me la puede arrebatar,

Levantare alas como las águilas, caminaré y no me cansaré,

Correré y no me fatigaré.