domingo, 8 de marzo de 2015

¿QUÉ HACES AQUÍ?



Y allí se metió en una cueva, donde pasó la noche. Y vino a él palabra de Jehová, el cual le dijo: ¿Qué haces aquí, Elías? 1 de Reyes 19:9 

Elías había caminado desde la cueva hacía Horeb, monte de Dios, durante 40 largos días, en los cuales tuvo la oportunidad de reflexionar, pensar y escudriñar su corazón a fin de entender cuál era su propósito en la vida, Dios se había manifestado de manera poderosa en su vida, sin embargo Elías entró en un punto crítico al verse amenazado por Jezabel, sus fuerzas se desvanecieron y ahora se encontraba en un lugar donde Dios no lo había llamado, el Eterno preguntó a Elías porque razón él estaba en Horeb, pues el profeta de Dios tenia realmente una gran labor que hacer con el pueblo de Israel, recién había pasado el evento del monte Carmelo e Israel necesitaba fuerzas y ánimos de parte del siervo de Dios.

La pregunta que Dios le hace a Elías nos deja una enseñanza muy enfática en nuestro tiempo, como colaboradores del Eterno se nos ha llamado a ir y pregonar un mensaje de salvación, sin embargo muchas veces en nuestro afán de querer trabajar en la obra de Dios, pensamos que debemos ir donde no se nos ha llamado, cuando realmente en nuestro entorno hay grandes necesidades, pues donde estamos muchas veces creemos que no es el terreno donde debemos estar y queremos ir en pos de nuevos viajes y descuidamos la obra que se nos ha brindado. Elías experimentaba lo mismo, estaba cansado del pueblo, fatigado y consideraba que solo sobre él estaba depositada la carga del evangelio, por tal razón caminó hasta el monte de Dios queriendo buscar una respuesta y así saber cuál era su propósito en la vida, sin embargo la labor por la cual él nació ya le había sido conferida, pero su misma depresión lo llevó a perder un poco el sendero por el cual debía caminar.

Entiendo cuán difícil es a veces lidiar con el peso de ser voceros del mensaje Divino, pues como hijos e hijas de Dios que salimos al campo de batalla, nos es a veces fatigante luchar con las inclemencias del tiempo, pues hoy en día, en este mundo tan lúgubre y dominado por Satanás, la lucha se vuelve intensa y sentimos que es muy poco lo que se cosecha. Sin embargo somos llamados a conquistar cada corazón que tenemos a nuestro alrededor. La obra de Dios requiere sacrificios pero es reconfortante cuando es notable que por tu influencia otros conocieran el mensaje de salvación.

Dios nos hace hoy un llamado a cada uno de nosotros, pueda que estemos con la actitud de Elías y que por un momento estemos perdiendo el rumbo de nuestro propósito, pero Dios nos insta a volver al camino correcto, a llevar a otros la Palabra que es como un manantial que refresca los labios del sediento, Satanás tiene a muchos dominados y nosotros podemos ser mensajeros que lleven luz al mundo y disipen las tinieblas de los demás, no necesitas emprender grandes viajes para hacer esta obra, donde estas, en la cercanía, puedes ser un Elías que proclame las verdades eternas, con tu familia, amigos, vecinos, existe una gran necesidad y eres tú el llamado a llevarles el mensaje de quien es la Verdad el Camino y la Vida.

Inicia hoy tu día con optimismo y deja que Dios conquiste tu corazón y que de esa manera te otorgue el propósito que debes alcanzar a fin de hacer su obra y mientras el Señor te llama a nuevos terrenos, dedica tiempo de tu vida a obrar en los alrededores de tu morada, pues donde tú te encuentras puedes sembrar la semilla del evangelio y con el tiempo veras que la cosecha será abundante, pues Dios así lo ha prometido. Ve y conquista tu tierra y de esa manera sabrás que hay un propósito para ti y que no hay mejor labor que ser un mensajero de la verdad, eso dará sentido a tu vivir y te alistaras en los héroes de la fe que dieron todo por la cusa y vencieron. Dios esté contigo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

✿ Espero que te haya gustado esta entrada y te haya sido de gran Bendición para tu vida. ✿ Dios te Bendiga Hoy y Siempre ✿